Los niños muchas veces se enfrentan al abuso de sus compañeros y sufren un trato vejatorio por tener una característica que les hace peculiar como puede ser llevar gafas, ser de otra raza, ser tímido o padecer Trastorno del Espectro del Autismo (TEA). A veces, simplemente son objeto de burlas sin razón aparente.
Hace unos días, la Cadena Ser informaba sobre el caso de un niño de ocho años con TEA que presuntamente padeció maltrato por parte de tres de sus cuidadoras. O sea, que estos menores, muchas veces, no se enfrentan solo al bullying por parte de sus iguales, sino también por parte de sus cuidadores, un dato a recalcar este 2 de mayo, Día Mundial Contra el Acoso Escolar.
Fuente: El Pais